El manejo farmacológico de adultos mayores con multimorbilidad y polifarmacia constituye un reto clínico creciente. En este grupo vulnerable, los medicamentos activos sobre el sistema nervioso central (SNC)—como antidepresivos, antipsicóticos, hipnóticos o ansiolíticos—se prescriben con frecuencia para tratar síntomas neuropsiquiátricos, dolor o insomnio. Sin embargo, su uso se asocia a efectos adversos relevantes, incluyendo caídas, deterioro cognitivo y mayor riesgo de hospitalización. En un contexto de envejecimiento poblacional y elevada carga de comorbilidades, comprender la repercusión de estos fármacos sobre la evolución clínica y la utilización de recursos sanitarios es esencial para mejorar la atención y reducir los acontecimientos prevenibles.
En esta cohorte multinacional de más de 2 000 pacientes hospitalizados, con edad media de 79 años, al menos tres enfermedades crónicas y cinco o más medicamentos prescritos al alta, los investigadores evaluaron la relación entre el número de fármacos activos sobre el SNC y los desenlaces al año1. Los resultados fueron claros: cada medicamento adicional de esta clase se asoció con un incremento del 7% en el riesgo de reingreso hospitalario y del 14% en el riesgo de mortalidad. Estos hallazgos se mantuvieron tras ajustar por factores demográficos, clínicos y psicosociales. Además, se observaron efectos negativos sobre calidad de vida y funcionalidad.
El uso de múltiples fármacos activos sobre el SNC en adultos mayores multimórbidos no solo incrementa el riesgo de efectos adversos, sino que también compromete la supervivencia y la calidad de vida. Por ello es necesaria la deprescripción, la revisión sistemática de tratamientos y enfoques interdisciplinarios que prioricen la seguridad y el bienestar del paciente.
Grupo de Geriatría basada en la Evidencia
REFERENCIA
Stuber MJ, Brockhus LA, Spinewine A, et al. J Am Ger Soc 2025. https://doi.org/10.1111/jgs.70049

